El desarrollo de Milk Life Investments se inserta en un corredor donde el valor de la vivienda ha crecido por encima del promedio nacional, impulsado por el nearshoring y el dinamismo industrial de León.
León, Guanajuato, 10 de diciembre de 2025.- Adamant Grand León Campestre presentó su primera etapa completamente terminada en un evento de cierre de año que reunió a inversionistas, brokers y clientes en la Zona Diamante de León, uno de los corredores urbanos con mayor consolidación inmobiliaria del Bajío. El encuentro, organizado por Milk Life Investments, tuvo como objetivo mostrar el proyecto en operación, sus amenidades activas y las oportunidades de inversión tanto en entrega inmediata como en preventa, en un contexto regional marcado por el crecimiento industrial, la llegada de capital ligado al nearshoring y una demanda sostenida de vivienda vertical bien ubicada.
La velada, realizada el pasado 4 de diciembre, permitió a los asistentes recorrer áreas comunes, amenidades y departamentos muestra, en un entorno que buscó transmitir no solo el estado físico de la obra, sino también la lógica urbana que articula vivienda, trabajo y servicios en un mismo circuito. Adamant Grand León Campestre forma parte de un conjunto de usos mixtos que integra la torre residencial con LEVEL Campestre León, complejo corporativo desarrollado también por Milk Life Investments y diseñado por el despacho de Mayer Hasbani, configurando un ecosistema urbano que responde a las nuevas dinámicas laborales y residenciales.
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Arte contemporáneo y experiencia sensorial: una lectura simbólica del proyecto
La velada incluyó la presentación de una nueva selección de obra reciente de la artista visual Laura Elena Garduño (Ciudad de México, 1986), cuyas piezas forman parte del proyecto Electric Bloom x, una serie que reflexiona sobre la relación entre naturaleza, tecnología y ciudad. Las obras, integradas de manera puntual al recorrido del evento, funcionaron como un contrapunto simbólico al discurso arquitectónico y urbano del desarrollo.
La propuesta de Garduño se inscribe en una línea de investigación visual que explora la tensión entre lo orgánico y lo artificial, así como los procesos de transformación que surgen en entornos urbanos contemporáneos. En el contexto de Entre Raíces y Ciudad, su trabajo dialogó con la narrativa del proyecto al plantear preguntas sobre cómo las ciudades crecen, se densifican y redefinen su vínculo con el entorno natural.
El componente sensorial del recorrido se complementó con la presencia de cuencos tibetanos, utilizados como recurso sonoro para acompañar la experiencia espacial. Lejos de funcionar como un elemento decorativo, el sonido marcó transiciones entre los distintos momentos del evento, subrayando una atmósfera de contemplación y pausa dentro de un entorno corporativo en operación.
Esta integración de arte contemporáneo y experiencia sensorial reforzó la intención del encuentro: presentar el proyecto no solo como una infraestructura inmobiliaria, sino como un espacio que busca incorporar dimensiones culturales y simbólicas a la vida urbana y laboral. En ese cruce entre arquitectura, arte y experiencia, el evento propuso una lectura más amplia sobre cómo se construyen hoy los entornos corporativos en ciudades en transformación como León.
León y el Bajío: crecimiento industrial, nearshoring y presión sobre la vivienda
León se ha consolidado como una de las ciudades clave del Bajío, región que concentra algunos de los principales clústeres industriales del país en sectores como automotriz, manufactura avanzada, logística y aeroespacial. De acuerdo con análisis de firmas como CBRE y Deloitte, el fenómeno del nearshoring ha impulsado la demanda de espacios industriales y consolidado al Bajío como un destino atractivo para inversiones relacionadas con manufactura automotriz y logística, reflejando la relocalización de actividades productivas hacia esta región de México.
Este dinamismo económico ha tenido un impacto directo en el mercado inmobiliario. Según datos del Índice de Precios de la Vivienda publicado por la Sociedad Hipotecaria Federal, la Zona Metropolitana de León registró un incremento en el valor de la vivienda de 11.1 % en 2024, por encima del promedio nacional, lo que refleja una fuerte dinamización del mercado inmobiliario en la región.
León, con una población cercana a 1.72 millones de habitantes y una estructura demográfica mayoritariamente en edad productiva, se ha convertido en un polo atractivo para ejecutivos, profesionistas y empresas que buscan operar fuera de las grandes metrópolis tradicionales, pero sin renunciar a infraestructura, calidad de vida y conectividad. En este escenario, la vivienda vertical de gama media-alta y alta ha ganado terreno frente al modelo horizontal, particularmente en zonas donde el suelo es escaso y la movilidad urbana se vuelve un factor estratégico.
Adamant Grand León Campestre se inserta precisamente en ese contexto: un desarrollo multifamiliar de alta gama ubicado en un corredor con servicios consolidados, comercio, hospitales, colegios y acceso directo a arterias viales clave. Su propuesta apunta a un mercado que combina residencia permanente, renta ejecutiva y patrimonio de largo plazo.
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Adamant Grand León Campestre: vivienda vertical en un entorno de usos mixtos
El proyecto ofrece departamentos de 1, 2 y 3 recámaras, distribuidos en más de 20 tipologías, con superficies que van de aproximadamente 39 a 182 metros cuadrados y precios que oscilan entre los 2.8 y los 7 millones de pesos. La torre integra más de 28 amenidades orientadas al bienestar, la vida social, el trabajo remoto y la recreación, bajo el concepto de un “residencial vertical con amenidades tipo resort urbano”.
Entre los espacios que ya se encuentran en operación destacan áreas de coworking, lounges sociales, terrazas panorámicas, zonas de ejercicio, áreas verdes y espacios pensados para la convivencia cotidiana. Durante el evento, los asistentes pudieron recorrer estas amenidades y constatar su funcionamiento, un elemento clave para inversionistas que buscan reducir el riesgo asociado a proyectos en planos.
La estrategia comercial del desarrollo se estructura en dos etapas. La primera contempla departamentos ya construidos, listos para escriturarse y ocuparse en el corto plazo. La segunda corresponde a inventario en preventa, con un calendario de obra y entrega estimada para el verano de 2028, orientado a quienes buscan capturar plusvalía en el tiempo y posicionarse en un mercado de renta ejecutiva en expansión.
Desde Milk Life Investments, desarrollador con más de 25 años de experiencia en el mercado mexicano, el proyecto se concibe como parte de una visión más amplia de ciudad compacta y caminable. “Con Adamant Grand León Campestre queremos que los clientes vean, en un mismo lugar, la realidad de la torre ya terminada y el potencial de la preventa. Este evento de cierre de año es una invitación a entrar a la Zona Diamante con un producto listo para habitar y con una historia de plusvalía sólida detrás”, señaló Moshe Hasbani, socio fundador y director de Operaciones de la firma.
Inversión inmobiliaria en ciudades medias: una tendencia en ascenso
El interés por invertir en ciudades medias como León responde a una lectura más amplia del mercado inmobiliario nacional. Mientras que plazas tradicionales como Ciudad de México, Monterrey o Guadalajara enfrentan saturación y altos costos de entrada, urbes intermedias ofrecen márgenes más atractivos y una relación más equilibrada entre precio, demanda y crecimiento económico.
Analistas del mercado inmobiliario han identificado que las ciudades intermedias, incluido el Bajío, están ganando atractivo para capitales que buscan diversificar su inversión más allá de los mercados tradicionales como Ciudad de México o Monterrey, consolidando un nuevo frente de crecimiento urbano y económico en el país
En este escenario, los desarrollos que integran vivienda, oficinas y servicios se convierten en activos estratégicos. No solo responden a la demanda actual, sino que anticipan la forma en que se habitarán las ciudades en la próxima década. Para León, esta transición representa una oportunidad para consolidarse como un referente urbano del centro del país, capaz de atraer talento, inversión y proyectos de largo plazo.
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Arquitectura, diseño y experiencia urbana
El diseño arquitectónico corre a cargo de Mayer Hasbani Arquitectos, despacho con experiencia en proyectos residenciales, corporativos y de usos mixtos reconocidos en certámenes internacionales como Titan Property Awards, Muse Design Awards, Architecture Masterprize y The Plan. En Adamant Grand León Campestre, la arquitectura busca conciliar densidad urbana con calidad de vida, privilegiando la iluminación natural, las vistas y la relación con el entorno inmediato.
“La arquitectura de Adamant Grand nace de una idea muy sencilla: vivir arriba de la ciudad sin perder contacto con ella. Las amenidades, las vistas y la mezcla de usos buscan que cada recorrido por la torre cuente una parte de esa experiencia”, explicó Mayer Hasbani, director general de Milk Life Investments y del despacho de arquitectura.
La integración con LEVEL Campestre León refuerza esta lógica de usos mixtos, al combinar vivienda, oficinas y comercio en un mismo predio. Para el mercado inmobiliario, este tipo de desarrollos responde a una tendencia global que busca reducir tiempos de traslado, optimizar la vida cotidiana y generar entornos urbanos más eficientes, especialmente en ciudades intermedias que crecen con rapidez.
El evento de cierre de año, con ambientación decembrina, música y recorridos guiados, funcionó también como un ejercicio de posicionamiento: mostrar el proyecto no como una promesa futura, sino como un activo inmobiliario tangible en un mercado que sigue atrayendo inversión nacional y extranjera.
En un Bajío marcado por la relocalización industrial, la presión sobre el suelo urbano y la transformación de los hábitos de vivienda, Adamant Grand León Campestre se presenta como una apuesta por la verticalidad, la mezcla de usos y la consolidación de corredores estratégicos. Un proyecto que busca capitalizar el momento económico de León y, al mismo tiempo, redefinir la experiencia de vivir y trabajar en una de las ciudades más dinámicas del centro del país.
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