Ensenada, B.C., jueves 27 de marzo de 2025 – La mañana del miércoles 26, autoridades de seguridad atendieron un reporte sobre una narcomanta colocada en las instalaciones de la Secundaria Técnica No. 28, ubicada sobre el bulevar David Sokolow, en la colonia Lomitas Indeco de Ensenada.
El hallazgo fue reportado a través de una llamada anónima al Centro de Control, Comando, Comunicación, Cómputo y Calidad (C5), lo que generó una movilización inmediata de elementos de seguridad pública.
En el lugar fue localizada una manta blanca con un mensaje escrito en tinta negra, con lenguaje violento y amenazas directas contra presuntos elementos de corporaciones policiales. El mensaje, firmado por un grupo criminal no identificado, advertía sobre la presencia de una supuesta “barredora”, haciendo alusión a un acto de limpieza violenta dentro del crimen organizado:
“ESTÁ MANTA ES PARA LOS PINCHES NARKOPOLICIAS KE APOYAN AL MERCENARIO Y MARINO LOS KE KEDAN ÁBRANSE A LA VERGA X KEYA ESTÁN UBICADOS EL PUERTO ESTÁ ARTO PUTOS RATAS AY VIENE LA BARREDORA IJOS DE SU PUTA MADRE”.
Tras el aseguramiento del mensaje, las autoridades procedieron a documentar los hechos, levantar las actas correspondientes y remitir la manta al Ministerio Público, instancia que abrió una carpeta de investigación.
Contexto: narcomantas como herramienta de control y amedrentamiento
Este nuevo episodio se suma a una serie de narcomantas colocadas en días recientes en los municipios de Mexicali y Tijuana, donde diversos mensajes con características similares han sido dirigidos a fuerzas de seguridad, funcionarios públicos y presuntos integrantes de grupos rivales.
De acuerdo con fuentes en materia de seguridad, el uso de narcomantas responde a una estrategia de comunicación de alto impacto, mediante la cual grupos delictivos buscan infundir miedo, marcar territorio y presionar a autoridades o rivales. Esta tendencia, que se ha intensificado en las últimas semanas, refleja un escalamiento en la disputa por el control de rutas y operaciones en la región.
El hecho de que estos mensajes estén apareciendo en espacios públicos y en entornos escolares representa un riesgo adicional, ya que expone a la población civil –particularmente a menores de edad– a escenarios de violencia simbólica que refuerzan la percepción de inseguridad.
Hasta el momento, las autoridades no han emitido información oficial sobre los posibles responsables ni sobre una línea concreta de investigación, aunque se prevé que en las próximas horas se amplíen los operativos de vigilancia en la zona.
