El purpurado canadiense, teólogo refinado y voz influyente en el Vaticano, representa una opción conservadora con perfil diplomático y experiencia curial.

Ciudad del Vaticano, 29 de abril de 2025.- En el complejo tablero del cónclave que elegirá al sucesor del Papa Francisco, el nombre del cardenal canadiense Marc Ouellet, de 80 años, vuelve a sonar con fuerza. Aunque su edad lo coloca justo en el límite para participar en la elección papal, su trayectoria como prefecto emérito de la Congregación para los Obispos, su formación teológica de primer nivel y su experiencia diplomática en América Latina lo convierten en un perfil sólido para quienes desean un retorno al equilibrio doctrinal y a una mayor centralidad del clero en la Iglesia católica.
Ouellet ya fue considerado un “papabile” en 2013, tras la renuncia de Benedicto XVI, y su candidatura vuelve al centro de las especulaciones, aunque hoy bajo una luz más matizada: como un símbolo de continuidad con las estructuras tradicionales de la Iglesia, pero también como un hombre que ha mostrado sensibilidad pastoral, especialmente en relación con los pueblos indígenas de Canadá.
Te recomendamos: La sucesión del Papa Francisco y el rumbo de la Iglesia: quiénes suenan como próximos papas
Un teólogo de peso con visión romana
Nació en la Motte, Canadá, el 4 de junio de 1994. Se formó en la Universidad Gregoriana de Roma y discípulo del influyente teólogo Hans Urs von Balthasar, Ouellet ha combinado a lo largo de su carrera la solidez académica con un estilo pastoral moderado. Fue arzobispo de Quebec y primado de Canadá, y desde 2010 hasta 2023 se desempeñó como prefecto de la Congregación para los Obispos, el poderoso dicasterio encargado de proponer candidatos episcopales en todo el mundo. En ese rol, ejerció una enorme influencia sobre la configuración del episcopado durante el pontificado de Francisco.
A pesar de su cercanía inicial con Benedicto XVI, con quien compartía sensibilidad teológica, Ouellet mantuvo una relación institucional correcta con Francisco. Sin embargo, ha mostrado matices críticos ante algunas reformas del recien fallecido pontífice, particularmente en temas relacionados con el papel de la mujer en la Iglesia y el alcance del Sínodo sobre la sinodalidad.
Lee también: Péter Erdő, el cardenal que podría convertirse en el próximo Papa

El Papa Francisco junto al Cardenal Marc Ouellet. Crédito: Vatican News.
Luces y sombras de una figura compleja
Su papel en la gestión de denuncias de abusos sexuales ha sido objeto de atención mediática. En 2022 fue acusado de conducta inapropiada en Canadá, pero tras una investigación vaticana, la Santa Sede desestimó las acusaciones al considerarlas “infundadas”, según informó Reuters. Aun así, el caso generó debate sobre los procedimientos internos de la Iglesia y la transparencia en torno a sus líderes.
Por otro lado, Ouellet ha sido una de las pocas voces de alto rango que ha abogado públicamente por un mejor diálogo entre la Iglesia y los pueblos originarios de América, especialmente en el marco de las disculpas del Vaticano por los abusos cometidos en internados católicos. Esta posición le ha ganado respeto en sectores progresistas del episcopado canadiense. Tiene publicados los libros Divine Likeness: Toward a Trinitarian Anthropology of the Family (2006), The Relevance and Future of the Second Vatican Council (2013) y Mystery and Sacrament of Love: A Theology of Marriage and the Family for the New Evangelization (2015).
Puede interesarte: Robert Sarah, el cardenal que podría convertirse en el próximo Papa
¿Un Papa de retorno al clero?
De ser elegido, Ouellet encarnaría la figura de un Papa preocupado por la ortodoxia doctrinal, la defensa del papel del sacerdote y la centralidad de la Eucaristía. Su papado, probablemente breve por razones de edad, podría significar una transición hacia un modelo de gobierno más colegial, pero menos reformista que el de Francisco.
En el tablero geopolítico eclesial, representaría también una elección desde el Norte global, en contraste con las aspiraciones de muchos sectores por un pontífice del Sur global. Pero en un cónclave marcado por la incertidumbre y el deseo de reconciliación entre distintas sensibilidades, la figura de Ouellet —con su mezcla de clasicismo y cortesía pastoral— no puede descartarse.
No dejes de leer: Matteo Maria Zuppi, el cardenal que podría convertirse en el próximo Papa

El Cardenal Marc Ouellet camina en la Plaza de San Pedro en el Vaticano. Crédito: Getty Images